Tras un año de investigación, el medio La Silla Rota publicó en 2018 un reportaje donde reveló una red de empresas inmobiliarias vinculadas a Simón Neumann Ladenzon y Fausto Ernesto Galván Escobar, quienes ocuparon la titularidad de la Secretaría de Desarrollo Urbano y el puesto como Coordinador General de Gestión para el Crecimiento del Desarrollo Económico (SEDECO), respectivamente, durante la gubernatura de Miguel Ángel Mancera.
Los reportajes de La Silla Rota, publicados el 19 y 20 de febrero de 2018, abordaron la existencia de una red de funcionarios públicos, dueños o accionistas de empresas de desarrollo inmobiliario, que violaron normas ambientales y de construcción en la Ciudad de México sin recibir ninguna sanción, pese a los proceso de revisión y ratificación de las violaciones que encabezó la Procuraduría Ambiental de Ordenamiento. Asimismo, en todos los casos transigieron la Norma 26 y vendieron departamentos a sobreprecio, por lo que hubo una oleada de demandas en contra de las empresas.
Algunos problemas que generaron los más de 20 millones de metros cuadrados de obras son desabasto de agua, problemas de movilidad, drenaje colapsado y sobreexplotación de los mantos acuíferos.
La Silla Rota documentó en su investigación un total de 11 desarrollos departamentales “que fueron construidos y/o vendidos por funcionarios públicos del jefe de gobierno como accionistas o representantes legales de las compañías”, así como por socios que trabajaban en otras empresas. De este modo, los funcionarios violaron la Ley Federal de Responsabilidades de Servidores Públicos en su artículo 47, que estipula que el servidor público “debe excusarse de intervenir en cualquier forma en la atención, tramitación, o resolución de asuntos en los que tenga interés personal, familiar o de negocios, incluyendo aquellos de los que pueda resultar algún beneficio para él, su cónyuge, parientes consanguíneos hasta cuarto grado, por afinidad laboral o civil, o por socios o sociedades de las que el servidor público haya formado parte”.
Neumann, además de haber sido el apoderado legal de las principales empresas inmobiliarias de la CDMX, desde su despacho controlaba a un grupo de excolaboradores de sus empresas, los cuales “ocuparon cargos estratégicos en el desarrollo urbano capitalino”.
A esto se suma que, durante años y antes de ser gobernador, Mancera fue el representante legal de ambos.
La herencia de Mancera: Sheinbaum detiene ocho megaobras
El pasado 6 de febrero, y tras la verificación de 174 construcciones, el gobierno capitalino que encabeza la morenista Claudia Sheinbaum detuvo la construcción de 8 megaobras con un valor de 500 mdd; además, revisó las licencias otorgadas entre 2017 y 2018 a los grandes desarrollos inmobiliarios. En total, aparte de las ocho mencionadas, fueron suspendidas 26 construcciones, de acuerdo con El Financiero.
El proyecto el hotel Hyatt Regency Insurgentes Mexico City, que iba a ser operado por Grupo Hotelero Santa Fe y contaba con una inversión de 85 millones de dólares y que empezaría a funcionar en 2020, fue suspendido; además, se detuvo la construcción de las torres de oficinas Impera Reforma de Pulso Inmobiliario, The Summit Santa Fe de FREL, Insurgentes 929 de ZKC, Corporativo Jaime Nunó de Moisés Farca, Río Tíber de Grupo ITISA, y las viviendas Residencial Chapultepec de HIR Inmobiliaria y la torre Enquentro.
Al parecer, las empresas abusaron al construir desarrollos más grandes en zonas no aptas, así como por no contar con los documentos correspondientes durante su verificación.
Apunta El Financiero que los 500 mdd representan el 20% que el sector inmobiliario pretendía desembolsar en la CDMX durante el año. En este sentido, algunos analistas señalaron que las medidas tomadas por el gobierno generarán incertidumbre en los inversionistas, lo que los hará desplazarse a estados como Monterrey, Querétaro o Guadalajara.
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