En la mañana de este martes, maestros de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) se instalaron con sus campamentos y mantas en las entradas de San Lázaro.
El magisterio disidente se declaró en estado de “alerta máxima”, con motivo de la discusión y aprobación de las leyes secundarias de la Reforma Educativa, que se deben aprobar a más tarde este jueves, ya que se vencen los 120 días de la aprobación de esta reforma constitucional.
En este sentido, el coordinador de Morena, Mario Delgado, solicitó a la presidenta de la Mesa Directiva, Laura Rojas, tener prudencia por la petición que hizo a las autoridades capitalinas y federales para resguardar con elementos de la Secretaría de Seguridad las inmediaciones del recinto parlamentario.
Ante este panorama, Laura Rojas (PAN) explicó que no pidió a las secretarías de Seguridad Federal, ni a las autoridades de la Ciudad de México, el envío de policías para resguardar las inmediaciones del recinto legislativo; aclaró que sólo solicitó apoyo de la seguridad vial para que los trabajos de la Cámara no se paralicen.
“Nosotros nunca vamos a reprimir a ningún manifestante, eso es importante decirlo, somos absolutamente respetuosos de la libertad de manifestación, libertad de expresión, jamás vamos a pedir el uso de la fuerza pública para reprimir a nadie”, expresó la diputada presidenta en entrevista con los medios.
