El presidente Andrés Manuel López Obrador, opinó que “no hay mala voluntad” en los gobernadores de Sonora y Chihuahua, tras las denuncias de Julián LeBarón de que las autoridades no acudieron a la emergencia.
Al preguntarle sobre el papel de la gobernadora Claudia Pavlovich y Javier Corral, sobre el ataque en sus estados, el mandatario dijo que todos cooperan, y no hay mala voluntad, no hay mala fe en las autoridades estatales.
“Es un asunto muy delicado, es muy triste porque pierden la vida niños. Duele mucho que se asesine a niños”, afirmó.
Esto después de que Julián LeBarón declaró que el apoyo de las fiscalías estatales no fue inmediato.
En ese sentido, López Obrador, subrayó que en estos casos es común que algunos sectores lleguen antes que otras instituciones —como fue el caso del ejército y las fiscalías de Chihuahua y Sonora.
Por ello, el titular del Ejecutivo insistió en que los problemas de seguridad deben ser resueltos mediante la coordinación de los niveles federal y estatales; en ese contexto -sentenció- no es momento de cargarle la mano a una sola dependencia.
“Independientemente de cualquier situación, nosotros somos responsables, el gobierno Federal tiene la responsabilidad de garantizar la paz, con la cooperación de las autoridades estatales“, reiteró.