La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) congeló las cuentas bancarias de Mario y Carlos Marín García, hijos del exgobernador de Puebla, Mario Marín, investigados por lavado de dinero.
Y es que de acuerdo a la UIF, la familia Marín es investigada desde 2019 por delitos fiscales y lavado de dinero, sin embargo, un juez federal de Puebla concedió a los hermanos Marín una suspensión de plano para que pudieran realizar operaciones financieras.
Sin embargo, el 29 de mayo, el Juzgado Primero de Distrito en Materia de Amparo Civil, Administrativa y de Trabajo y de Juicios Federales en el Estado de Puebla admitió un incumplimiento a la suspensión del plano, pues sus cuentas no fueron desbloqueadas.
Esto debido a que, la Unidad de Inteligencia Financiera interpuso una queja ante el Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Sexto Circuito para mantener el bloqueo de las cuentas a fin de que no puedan disponer de los recursos mientras realizan la investigación.
Los efectos de esta suspensión están condicionados a que el bloqueo de cuentas bancarias no se haya emitido a partir de un supuesto válido previsto por el artículo 115 de la Ley de Instituciones de Crédito esta suspensión no surtirá efecto alguno, si el bloqueo de cuentas fue ordenado por diversa autoridad responsable, o tenga origen en una orden judicial, pues estos supuestos cambian la naturaleza jurídica del acto reclamado”, señala el acuerdo judicial.
Cabe recordar que el ex gobernador se encuentra prófugo desde el 11 de abril de 2019, cuando se giró una orden de aprehensión en su contra por el delito de tortura en contra de la periodista Lydia Cacho
