En el marco de la epidemia de Covid-19 y con el fin de asegurar que se cumplan las medidas sanitarias recomendadas por la Secretaría de Salud, Gabriel García Hernández, Coordinador General de Programas Integrales de Desarrollo, dio a conocer que se espera que 2 mil 245 escuelas ubicadas en la República Mexicana, inviertan en instalaciones para obtener agua potable.
Esta nueva infraestructura se espera que se financié gracias a los recursos que el Gobierno Federal entrega a más de 50 mil comités escolares a través del programa “La Escuela es Nuestra”.
Cabe señalar que el programa “La Escuela es Nuestra”, consiste en que el gobierno mexicano entrega recursos a más de 50 mil comités, cuyos equipos están conformados por padres y madres de los mismos alumnos; con el fin de que este dinero se ocupe para la construcción, reparación y mantenimiento de las instituciones educativas públicas.
El destino de este dinero lo deciden los mismos comités beneficiarios del programa; sin embargo, Gabriel García Hernández, fue claro al exponer en conferencia de prensa que por la coyuntura actual, el gobierno de México se ve en la necesidad de sugerir a ciertos equipos, utilizar dichos recursos para habilitar y reforzar instalaciones de agua potable.
Por otro lado, el Coordinador General de Programas Integrales de Desarrollo, recordó que dicho programa no solo sirve para mejorar las instalaciones en las escuelas públicas, sino también impulsa la generación de empleos en las comunidades más vulnerables; debido a que las personas que realizan dichas construcciones son personas que viven y trabajan en la misma localidad.
Este programa se enfoca principalmente en localidades donde se registra una muy alta y alta marginación, por lo cual “La Escuela es Nuestra” beneficia principalmente a instituciones educativas en condiciones precarias ubicadas en: Chiapas, Oaxaca y Veracruz.
Cabe destacar que de las poco más de 103 mil escuelas con condiciones precarias que se encuentran ubicadas dentro de la República Mexicana, este programa apoya y cubre a más del 48 por ciento de dichas instituciones que cuentan con estas características.
No obstante, este programa beneficia casi a la mayoría de las escuelas ubicadas en localidades indígenas; es decir, “La Escuela es Nuestra” beneficia al 89 por ciento de las instituciones educativas que se encuentran establecidas en dichas zonas.