A nadie sorprende que Juan Ignacio Zavala, cuñado del expresidente Felipe Calderón y hermano de la actual diputada federal por el PAN Margarita Zavala, sea uno de los principales columnistas detractores del gobierno de la Cuarta Transformación. Lo que realmente sorprende es su falta de memoria y de sensatez.
El día de hoy 13 de septiembre, Juan Ignacio Zavala escribió para su columna semanal en El Financiero Autonomía Relativa el título de “El Primor en acción” columna en la que da cuenta según él, de cómo el presidente López Obrador “compró al PRI y pagó poco”.
Zavala describe que “el priismo está más cerca de Morena que de la oposición”, quizá lo dice a raíz de las declaraciones que hiciera el Presidente López Obrador tras las elecciones del pasado junio, donde señaló que se podría hacer “un acuerdo con el PRI” al no contar con la ‘mayoría calificada’, que tanto quería ver la oposición, y que por cierto una vez que el mandatario lanzó dichas declaraciones no tardó en cantar el gallo, cuando el presidente del PRI, Alejando Moreno, salió a decir que ninguna manera se pactaría con morena.
Aunque lo verdaderamente interesante del posicionamiento de Zavala, tiene que ver con su anacrónica y forzada acción de comparar al AMLO priista de los años 70´s con el presidente progresista de México en este 2021, pues con sus conjeturas tan risorios como: “los expriistas de ayer junto con los priistas de hoy son la fuerza gobernante en el país encabezada por López Obrador, un priista de viejo cuño”, no obstante aunque se diera por válido el argumento, que por cierto todo mundo sabe, del pasado priista de AMLO, hay que decir que sí así fuera, su priismo sería enmarcado dentro del Nacionalismo – Revolucionario y no del neoliberalismo depredador y rastrero, en el que tanto los hermanos Zavala como Felipe Calderón, suscriben sin mayor resquemor..
Sí bien pudo ser criticada la posición de López Obrador al integrar a su gobierno a Quirino Ordaz el gobernador saliente de Sinaloa, propuesto por el ejecutivo para la embajada de España; López Obrador no es un neófito político y sabe de los costos políticos que pudieran tener esas decisiones, lo que sí hay que decir es que desde nuestro punto de vista, al sostener que lo más importante es México, más allá de las banderas políticas, el Presidente pone orden en el desbarajuste político de la lógica despolitizadora en la que nos quiere sumir el PRIANRD, pero se corre un riesgo el intentar desteñir las hebras políticas y meterlas en un paulatino proceso político de envilecimiento ideológico, que podría ser que se corra la 4T al centro, o como diría AMLO a la “nada”, aun cuando sabemos que AMLO confía en el pueblo, y sabemos que es el máximo juez que pone a cada cual en su lugar.
Después de esta catarsis, regresemos con Zavala, pues sí bien podemos condonarles sus críticas respecto a las intenciones de AMLO de agregar a cuadros priistas a su gabinete, no podríamos dejar de pasar por alto su dichos respecto a la alianza opositora “¡Va por México!” a la cual la señala por “no servir de nada”, bueno quizá sí sirvió de algo, encumbrar a su hermana Margarita Zavala como diputada federal del distrito 10 en la Miguel Hidalgo, así que el PRIANRD desde hace mucho está en acción y Juan Ignacio lo sabe.
