El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó esta mañana de jueves que haya algún tipo de venganza por parte de su gobierno en contra de Rosario Robles.
Durante la conferencia matutina, el mandatario indicó que “por lo que corresponde al Ejecutivo no hay ninguna venganza, nosotros no hacemos eso, eso es inmoral, es indigno, eso le resta a cualquiera autoridad”.
Más adelante, explicó que la decisión jurídica sobre la exsecretaria de Desarrollo Social es un asunto del Poder Judicial, no obstante, reconoció que si consideran que el juez no actuó con independencia se le debe investigar.
“En el caso de Rosario Robles es un asunto del Poder Judicial y si el juez recibió una orden o actuó por consigna debería de ser sancionado, porque los jueces deben actuar con autonomía”, afirmó.
El mandatario mexicano recomendó revisar al juez y permitir que incluso participe la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), así como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, si se piensa que hay una injusticia.
Reiteró que para su gobierno lo más importante es la autoridad moral y no hay persecución a nadie ni se denuncia por consigna política.
El titular del Gobierno de México puntualizó que estos asuntos se tratan primero con la Fiscalía General de la República (FGR) y luego con el Poder Judicial, mismos que, aseveró, “ya muestran un avance en la separación de los poderes y que el Ejecutivo no interviene dado que se respeta la división de poderes y la autonomía de la fiscalía”, aseveró.
