El expresidente de Ecuador Rafael Correa respondió este jueves al requerimiento de la Fiscalía General de Ecuador, que este día pidió la pena máxima contra el exmandatario por un presunto caso de corrupción ocurrido durante su Gobierno.
“Cada vez que habla, despeja cualquier duda sobre su ‘capacidad’ e ‘imparcialidad’. Que haga bien su canallada. Si falla, la presa será ella”, tuiteó Correa tras la conferencia de prensa de la fiscal general, Diana Salazar.
Correa, que gobernó Ecuador de 2007 a 2017, ha sido perseguido por el gobierno de Lenin Moreno, antes aliado del expediente pero ahora político allegado a las políticas neoliberales de los Estados Unidos.
Este jueves, durante el alegato de cierre en el ‘Caso Sobornos’, el Ministerio Público ecuatoriano pidió la pena máxima contra Correa y sus colaboradores por supuestamente exigir coimas a empresas privadas a cambio de contratos en obras públicas.
Salazar dijo en conferencia de prensa que desde las más altas estructuras de poder, “se creó una estructura para recibir sobornos y a cambio de contratos”. Según la funcionaria, ese esquema estaba representado por Correa, a quien acusa de haber tenido a su cargo a otras personas que ejecutaban sus órdenes.
La Fiscalía General pidió ocho años de prisión para Correa y sus excolaboradores, así como una multa en concepto de reparación del daño por mil 130 millones de dólares, que según Salazar, asciende al monto de los contratos otorgados.
La Fiscalía ecuatoriana señala la presunta participación de los exfuncionarios en la financiación de actividades proselitistas del partido político de Correa, Alianza País, con dinero de empresarios contratistas estatales.
Sin embargo, Correa ha acusado que en el país suramericano se ha utilizado a la Justicia como un instrumento de persecución.
“Están desesperados para evitar mi participación en las próximas elecciones (previstas para febrero de 2021), porque saben que los vamos a derrotar”, ha dicho Correa, en entrevista con RT.
Con información de RT Noticias.