El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, condenó este lunes la situación en Myanmar (también conocido como Birmania), luego que el Ejército tomó el control del Gobierno, en la víspera de la inauguración del periodo ordinario de sesiones del parlamento.
En un comunicado, Guterres dijo además estar sumamente preocupado por la detención de la líder civil Aung San Suu Kyi, del presidente U Win Myint y de otros miembros de su partido, durante una redada protagonizada por soldados durante la mañana de este lunes.
“Estos desarrollos representan un duro golpe para las reformas democráticas en Myanmar”, manifestó el dirigente del máximo organismo mundial.
Guterres expresó el respaldo de la ONU al pueblo de Myanmar en su búsqueda de la democracia, la paz, los derechos humanos y el estado de derecho.
El Gobierno de India, de su lado, expresó su “profunda preocupación” por los arrestos de dirigentes polìticos y por los informes de un golpe militar en Myanmar, y pidió respeto al estado de derecho y el proceso democrático.
La televisión militar anunció este lunes que el poder fue transferido por un año al jefe del Ejército, Min Aung Hlaing, periodo en el cual el actual vicemandatario Myint Swe se desempeñará como presidente interino.
Desde que el 8 de noviembre pasado la Liga Nacional por la Democracia, de Aung San Suu Kyi, ganara las elecciones parlamentarias, logrando 396 de 476 escaños, los partidos perdedores -ligados al Ejército- alegaron fraude.
La Liga Nacional entabló negociaciones con miembros del Ejército para limar diferencias y conformar Gobierno, sin embargo, las mismas concluyeron sin èxito, según el portal The Irrawaddy.
En Australia, la ministra de Relaciones Exteriores, Marise Payne, manifestó: “Llamamos al ejército a respetar la ley, a resolver disputas a través de mecanismos legales y a liberar de inmediato a todos los líderes civiles y otras personas detenidas ilegalmente”.
A su vez, John Sifton, de la organización Human Rights Watch, indicó: “La Junta Militar que gobernó Myanmar durante décadas en realidad nunca se fue del poder para empezar”.
“En realidad nunca se sometieron a la autoridad civil, por lo que los eventos de hoy, de alguna manera, simplemente revelan una realidad política que ya existía”.
Por su parte, la Casa Blanca expresó: “Estados Unidos se opone a cualquier intento de alterar el resultado de las recientes elecciones o impedir la transición democrática en Myanmar, y tomará acciones contra los responsables si esas medidas no se revierten”, dijo la vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, en un comunicado.
Asimismo, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, pidió al ejército birmano “liberar a todos los responsables del gobierno así como a los dirigentes de la sociedad civil y a respetar la voluntad del pueblo de Myanmar tal y como se expresó en las elecciones democráticas del 8 de noviembre”.
Exigen en Myanmar la liberación inmediata de Aung San Suu Kyi
En tanto, organizaciones políticas y partidos opositores, y la Liga Nacional por la Democracia, de Myanmar, exigieron este lunes la liberación de Aung San Suu Kyi, detenida por los militares tras la asonada que sacó del poder al presidente Htin Kyaw.
En las elecciones generales del 8 de noviembre de 2020 fueron ganadas por la Liga Nacional para la Democracia (LND), liderada por Aung San Suu Kyi.
Suu Kyi, premio Nobel de la Paz, no pudo ocupar la presidencia de Myanmar por cuestiones legales, pero su liderazgo fue clave para la organización del Gobierno democrático y ejercía gran influencia el presidente derrocado.
Myanmar o Birmania, es una nación del Sudeste Asiático con más de 100 grupos étnicos, que limita con la India, Bangladés, China, Laos y Tailandia. Rangún es la ciudad más grande del país y cuenta con desbordantes mercados, numerosos parques y lagos, y la altísima pagoda Shwedagon cubierta de oro, que contiene reliquias budistas y data del siglo VI.
Con información de TeleSur, BBC, ONU.