Hoy a las 4:47 de la mañana el Pleno de la Cámara de Diputados por fin aprobó la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica enviada por el Ejecutivo Federal, y aunque algunos celebraron la decisión del Palacio Legislativo, para otros la contrarreforma no resulta viable.
Tal es el caso de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), quien “lamentó la aprobación de la reforma”, asegurando que con ella se va en contra de la economía y de la salud de los mexicanos, pues no privilegia ni a las familias ni a los usuarios.
A través de un comunicado la instancia expuso que se trata de una decisión irresponsable”, pues se dio la espalda al derecho, al medio ambiente y a la salud, puesto que con la reforma se pondrán en operación centrales eléctricas que utilizan como combustible el carbón, combustóleo y diésel, las cuales que emitirán una mayor cantidad de partículas de dióxido de azufre a la atmósfera.
“En Coparmex lamentamos que la mayoría de las y los diputados desatendieran las razones técnicas y económicas expuestas por los especialistas durante los dos días de parlamento abierto, donde claramente se señaló el despropósito que representa esta reforma con la que se pierde competitividad y se compromete el futuro del país”, indicó.
Agregó que el Legislativo ignoró a las voces y organismos de quienes alertaron “que la reforma en sus términos vulnera los compromisos asumidos por México en el T-MEC y otros tratados internacionales suscritos, así como la certeza jurídica de las inversiones”; lo cual en conjunto con que no se respetará la libre competencia, convertirán “a esta potencial reforma en una legislación que seguramente se impugnará desde el primer día de su publicación”.
En este sentido, la Coparmex, llamó a los senadores a enmendar la minuta que recibirán de la Cámara de Diputados, “para que sean sensibles ante las graves consecuencias y efectos regresivos la modificación representará, y que de forma directa se traducirían en un alza a las tarifas que pagarían las familias y las empresas”.
Resaltaron que la decisión fue tomada bajo una perspectiva ideológica, y que debió ser de manera técnica, ya que ante la crisis económica que enfrenta el país, se requiere de más inversiones que propicien crecimiento y generen empleo. “Con esta reforma se estaría mandando un mensaje equivocado al mundo, México no es ni debe ser un país cerrado o que vulnera la participación de la inversión privada”, argumentaron.
“Estamos convencidos que México necesita un sector energético fuerte y con visión de largo plazo, que maximice la inversión tanto pública como privada. El sector privado está listo, puede y debe continuar participando en la creación de infraestructura energética para el bien de todos los mexicanos”, concluyó la Coparmex.
Cabe destacar que el dictamen a la iniciativa que remitió el presidente Andrés Manuel López Obrador con carácter preferente, el pasado 1º de febrero, se avaló luego de que se desahogaron, en un promedio de 11 horas, las 412 reservas. El objetivo central es fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE); garantizar la confiabilidad, así como mantener un sistema tarifario de precios, que únicamente serán actualizados en razón de la inflación.
