El Subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas, enfatizó que la llamada “Verdad Histórica” del caso Ayotzinapa se obtuvo mediante el uso de tortura, mientras que la Comisión que él encabeza “no torturó a nadie”.
Durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, Encinas presentó “una breve síntesis” del informe presentado en días pasados. “Cuando señalamos que la “Verdad Histórica” se diseñó en los más altos niveles del gobierno federal, involucra a todas aquellas personas que participaron en las reuniones de la Presidencia de la República en la discusión de estos temas”.
“Y es ahí donde habrá que ubicar no solamente el diseño, sino particularmente la operación y la implementación de estas acciones, que en muchos casos hay presunción de alteración de la escena del crimen y particularmente lo que está plenamente acreditado es haber creado una verdad fundada en actos de tortura”.
La desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa debió evitarse, “sin duda las omisiones de la autoridad –de los tres niveles de gobierno— permitieron que ésta se concretara”, enfatizó el Subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.
Al exponer el tema, Encinas explicó porque fue una operación de Estado que encabezó el Procurador General de la República de ese momento, Jesús Murillo Karam, ahora detenido y sujeto a proceso, dijo que una diferencia sustancial y de fondo con la “Verdad Histórica”, defendida incluso durante su presentación con la autoridad judicial por Murillo el pasado miércoles en el Reclusorio Norte, es que “se sustentó en las declaraciones obtenidas mediante tortura a los detenidos, en la fabricación de pruebas y la manipulación de la escena del crimen. Nosotros no torturamos absolutamente a nadie“.
Explicó que el informe de la Comisión es resultado de la reconstrucción y análisis del caso Iguala en dos momentos: el análisis de los antecedentes, hechos y contextos de personas que participaron en la desaparición forzada de los jóvenes, las repercusiones posteriores y la intervención de las autoridades de los diferentes órdenes de gobierno en el encubrimiento de los hechos.
Y dos: “dicen que es una posición política del gobierno, pero no, es el resultado de un proceso de investigación y análisis técnico y científico que contó con el apoyo y asesoría de un comité científico y asesor y de un grupo interdisciplinario integrado por personas de diversas instituciones públicas convencidas qué ciencia y tecnología deben estar al servicio de la verdad.“
“ Y sí, también hay un contenido político: esclarecer un crimen, más de uno de Estado, además que es una responsabilidad del gobierno, es un asunto que hemos encarado con convicción y voluntad política para ir al fondo de los hechos“.
Cuestionado sobre la participación del Grupo interdisciplinario de Expertos Independientes, el Subsecretario indicó que ha estado participando en las investigaciones y que tiene acceso a toda la información de manera permanente.
Al ser cuestionado sobre las críticas que sostienen que el informe se basa en una sola fuente, replicó que hay al menos 13 fuentes básicas distintas: toda la información y documentación que aportaron las Secretarías de Gobernación, de la Defensa Nacional, de la Marina Armada de México, de Seguridad y Protección Ciudadana, del Centro Nacional de Inteligencia, de la Guardia Nacional, de la Procuraduría Fiscal del Estado de Guerrero, de la Fiscalía General de la República; así como de los informes que ha elaborado el propio Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el Centro GEO del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y del propio Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, que es una de las cuatro organizaciones que ha acompañado a los padres de los normalistas desaparecidos entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014.
“Los críticos dicen que el informe no dice nada nuevo, que es lo mismo que la “Verdad Histórica”, lo que es absolutamente falso. La “Verdad Histórica” se sustenta en que los estudiantes acudieron a Iguala a boicotear el informe de la Presidenta del DIF en ese municipio (María de los Ángeles Pineda), lo cual es falso, porque la misión de ellos era tomar camiones y su llegada a Iguala fue al momento que había concluido este evento, e incluso el festejo organizado en la plaza central había concluido”, detalló Encinas.
Una diferencia más es que la versión de Murillo Karam –que fue encabezada por el ex titular de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón, prófugo de la justicia que se encuentra en Israel— apuntaba a que se dieron “enfrentamientos” entre estudiantes y policías municipales de Iguala, “los cuales no existieron porque fueron agresiones de los uniformados a los jóvenes”; la “Verdad Histórica” agrega que la policía de Iguala entregó al grupo delictivo Guerreros Unidos a los normalistas, quienes fueron ultimados e incinerados en el basurero de Cocula y sus restos depositados en bolsas de plástico y vertidos en el río San Juan. A lo que el Subsecretario contestó : “En ningún momento los estudiantes estuvieron juntos, hubo un operativo especial que los dispersó en distintas regiones del perímetro de Iguala y sí, hubo actos de agresión donde el grupo de Guerreros Unidos, en coordinación y complicidad con fuerzas de seguridad y autoridades de orden municipal, estatal y federal, ultimaron y desaparecieron a los estudiantes”.
