Demandan a gobernador de Veracruz acompañar a víctimas en búsquedas

 

Desde 2012 Araceli Salcedo busca a su hija Fernanda Rubí Salcedo, quien desapareció tras ser levantada por un comando armado en una discoteca de Orizaba, Veracruz.

A seis años de la desaparición, Salcedo se ha transformado en una de las activistas más notorias entre los colectivos que buscan por cuenta propia a sus familiares desaparecidos en el estado, cuyo gobierno declaró una “crisis humanitaria” en la entidad luego de reconocer que hay al menos 5 mil personas desaparecidas, de acuerdo con cifras oficiales.

                Salcedo salió a luz pública tras encarar al ex gobernador priista Javier Duarte de Ochoa. En 2015, le espetó ante las cámaras de los medios de comunicación que sus Fiscalías, cuyo titular actualmente es acusado de desaparición forzada, no ayudaban en nada a los colectivos que buscaban a sus familiares, quienes fueron secuestrados por células delictivas e incluso por los propios cuerpos policiales vinculadas a estas.

                “No se vale, usted viene con su familia… ¿y la mía dónde está? No se se escude señor gobernador, sus fiscalías no sirven, no nos ayudan en nada. Aquí está su pueblo mágico, donde nos desaparecen a nuestros hijos mientras usted como si nada. Y no se burle, quite su sonrisa, porque yo no vivo desde ese tiempo, señor. Usted y el fiscal son lo mismo: pura corrupción. Espero que no le toque a su familia; porque el día que le toque sabrá lo que se siente sufrir”, reclamó Salcedo en dicho video donde Duarte, sin muestras de perturbación, continúa caminando sin darle la cara.

                Al año siguiente, 2016, la ahora presidenta del Colectivo de Familias De Desaparecidos Orizaba-Veracruz fue encañonada por elementos de la policía estatal de Veracruz y de Orizaba, acto que ella y la  Brigada Nacional de Búsqueda de Familiares definieron como “un acto claro de hostigamiento”.

                Hoy, tras ocho años, la búsqueda sigue. Ayer fueron localizados 15 cuerpos en Río Blanco. Araceli Salcedo señaló en exclusiva para A Barlovento Informa que la osamenta más antigua hallada en la zona data de siete años atrás. Además, exigió una mayor atención por parte del gobernador del estado, Cuitláhuac García Jiménez, a quien solicitó visitar “la zona de exterminio” en la que trabajan, así como inyectar mayores recursos a las instituciones que colaboran en las búsquedas.

                Reveló que llegaron a la zona  gracias a un croquis proporcionado por un informante anónimo, quien les avisó que en la zona “no iban a encontrar un cuerpo, sino muchos”.

                “Efectivamente así fue. Llevamos un mes subiendo todos los días desde muy temprano. Se ha estado haciendo trabajo por cuadrantes en colaboración con la Fiscalía General del Estado y la Fiscalía general de la República. Se han encontrado las fosas en continuidad, llevamos quince cuerpos ya rescatados. Hasta el día de ayer eran doce, ayer lunes se trabajó una fosa más que, nos reportan,  tiene más de tres cuerpos. Igual hay una fosa con dos cuerpos. Tenemos cinco más marcadas y no llevamos ni siquiera el 30% del terreno donde tenemos que hacer un barrido bastante extenso”, explicó.

                Dijo que hasta el momento, por las condiciones del lugar, solo pueden participar 10 familias en las labores de búsqueda, así como 40 servicios periciales. Por otra parte, denunció que se encuentran “bastante expuestos” y no han obtenido el respaldo que solicitaron con anterioridad a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Veracruz.

                “Arriba no podemos ser muchos. Ahora hay diez familias nada más, en compañía de unos 40 servicios periciales. Te comento esto porque estamos demasiado expuestos; no hemos tenido el resguardo que le hemos solicitado a Seguridad Pública del Estado de Veracruz. Solo se ha mandado a tres elementos en una patrulla, con lo que es imposible tener seguridad para 50 personas. El colectivo está conformado por más de 370 familias y además nos han contactado unas 55 familias más para decirnos que tienen algún desaparecido por la zona de Río Blanco”, señaló.

                “Nosotros quisiéramos que el gobernador hiciera una visita y conociera el lugar donde estamos trabajando: un campo de exterminio. Caminamos 370 metros en unas condiciones terribles, de muy difícil acceso, y posteriormente vienen en continuidad las fosas”, apuntó.

                Argumentó que si a comienzos de la administración actual se declaró crisis humanitaria en el estado, debería ser una obligación inyectarle más recursos a las instancias que colaboran con las labores de búsqueda para que puedan hacer mejor su trabajo.

                “Cuando comenzó el mandato se declara crisis humanitaria en el estado de Veracruz, y yo creo que cuando pasa eso tienes que dar inmediatamente el presupuesto para que las instancias que colaboran en todo esto puedan hacer bien su trabajo.

“Y sobre las amenazas, estamos acompañados: recientemente estuvo con nostros personal de la Fiscalía, de la SEIDO y la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Carla Quintana, quien también se percató de la situación de vulnerabilidad en la cual estamos en esa zona.

“Han salido unos supuestos comunicados del Cártel Jalisco Nueva Generación donde señalan que esas fosas fueron generadas por comandantes de la policía del estado de Veracruz en colusión con miembros de la delincuencia organizada. Como se sabe, la policía trabaja sistemáticamente con la delincuencia en el estado de Veracruz”, denunció.

                Agregó que sus abogados han buscado a organizaciones internacionales para informarles sobre la situación que viven, de tal manera que puedan obtener medidas preventivas y un mayor respaldo.

                “Se mandó un exhorto por parte de los abogados al Comité de Desaparición Forzada en la ONU, en cuanto a las medidas cautelares y la situación que estamos viviendo. Hace un año también nos manifestamos en Europa, abordando todo lo que se ha ido encontrando en el estado de Veracruz y en todo el país. De igual manera, creo que en Veracruz, lejos de disminuir la violencia, se está yendo a la alza”, subrayó.

                “Y te doy un dato: las arqueólogas que nos acompañan comentan que la osamenta más antigua oscila de los siete años para acá. Estamos hablando del gobierno duartista, cuando más recrudeció la violencia en Veracruz, y que su secretario de seguridad  enfrenta un proceso legal de desaparición forzada”, agregó.

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