Política de brazos abiertos evidenció la falta de infraestructura que se tiene para atender el fenómeno de migración desde el pasado
Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), aseguró que vigilarán junto con la secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero, a través de protocolos, la actuación, de 6 mil elementos de la Guardia Nacional que serán desplegados en la frontera.
“Se verificará que haya protocolos, se vigilará que sea prioridad la seguridad nacional, sobre la seguridad humana”, expresó González Pérez.
En una breve entrevista, al término de la conmemoración del Día de la Libertad de Prensa en el Centro Cultural de México Contemporáneo, aseguró que la política de brazos abiertos, evidenció la falta de infraestructura, “de un éxodo de migración que teníamos desde el pasado”.
El ombudsperson nacional, consideró que así como se condenó a Estados Unidos para no militarizar la frontera la frontera norte, México no debe caer en la misma prospectiva.
“Así como soy crítico, reconozco cuando en esa carta se puso de manifiesto la dignidad de la nación, segundo, se dijo que se deberían poner los derechos de lo migrantes a cualquier otra política, tercero se dijo que dialogar, no se debe confundir con debilidad”, añadió.
Sugirió que la Guardia Nacional solo debe ser de acompañamiento, y con ello, no se priorice la seguridad nacional sobre los derechos humanos de personas, sobre todo los centroamericanos que vienen de una condiciones de pobreza y vulnerabilidad.
